La felicidad es un concepto bastante relativo. En función de cada persona la felicidad puede ser una cosa u otra. Hay gente que sería feliz con millones de euros, otros con su pareja ideal (otro concepto relativo), otros viajando por el mundo y otros yendo a misa todos los Domingos.
Lo dicho, es bastante difícil asociar la felicidad a algo tangible por decirlo así, pero es muy fácil asociarlo a un sentimiento o a un estado emocional. Nos sentimos bien cuando somos felices, se nos olvidan los problemas, aparcamos los malos rollos y sonreímos a la vida.
¿Os imagináis que una marca comercial consiguiera asociarse a la palabra felicidad? ¡Menudo partner!. Ya sabéis de quién hablo ¿No? Coca-cola. Desde luego el mejor marketing del mundo ya que no solo han conseguido asociar la palabra felicidad a la marca Coca-cola sino que casi lo han dado la vuelta. Parece que una persona ya no está feliz sino que está Coca-cola.
Cada vez que su departamento de Marketing saca un anuncio nos deja a todos con la boca abierta. Hay que quitarse el sombrero porque solo ellos lo han conseguido. Asociar un producto a una emoción no es nada fácil y menos a la felicidad.
Es casi imposible ver un anuncio de Coca-cola y no sentir algo dentro. Coca-cola lo ha vuelto a lograr, aquí os lo dejo. Disfrutarlo!!
¡Genial! No sólo lo han vuelto a conseguir, sino que ni siquiera necesitan palabras! Al margen del acierto de la campaña (y van unas cuantas), es interesante recordar la gran capacidad de contagio de la risa. Hasta el punto de que en algunos países se está utilizando como instrumento de terapia en empresas y espacios de trabajo, para mejorar la relación entre los empleados, y de paso relajar el ambiente laboral.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Ir por la vida con una sonrisa como firma suele hacer que te ocurran cosas buenas, o eso pienso yo.
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