¿Os imagináis una ciudad en la que se pudieran hacer pruebas de todo tipo sin la interacción humana? Sin los problemas que ello presentaría, los científicos tendrían vía libre para desarrollar sus proyectos.
La multinacional Pegasus Global Holdings quiere comenzar a construir este año una ciudad con una capacidad de 35.000 habitantes en el desierto de Nuevo México. Invertirá unos 1.000 millones de dólares y la idea es que sea una especie de laboratorio de 39 Km cuadrados.
Al ser un proyecto tan ambicioso esta multinacional ha abierto las puertas de la CITE a la colaboración de otras empresas, laboratorios públicos y universidades.
Quieren desarrollar un entorno lo más realista posible con edificios, barrios, y construcciones similares a las de una ciudad. Con su red de carreteras rurales, urbanas e interestatales. Sería un entorno perfecto, por ejemplo, para que Google o Apple probaran su coche sin conductor.
En esta ciudad se podrán probar nuevas tecnologías para los edificios y nuevas técnicas de construcción resistentes a un seísmo, sin ir más lejos. Todas las casas tendrán su sistema de Smart Grid para el uso eficiente de energía. Este sistema estudia el consumo de energía por usuario, cuánto consume, cuándo, qué tipos de energía usa, así de esta manera poder optimizar al máximo el gasto de energía llegando a cumplir los objetivos que la Unión Europea se marcó para el 2020.
La CITE tendrá un núcleo externo donde experimentar con nuevas tecnologías energéticas como por ejemplo los motores biopower, que funcionan con bioetanol. Algunas marcas de coches ya los están incorporando a sus desarrollos. Además no se olvidaría de las ya existentes como la geotérmica, solar o eólica.
Otro gran objetivo que se quiere llevar a cabo en CITE es la recuperación medioambiental. Estudiar plantas, hongos, enzimas o microorganismos para sanear un ambiente contaminado y devolverlo a su estado puro y limpio.
En otros sectores de la CITE se quiere estudiar la desalinización del agua para consumo o el regadío eficiente. A la inversa, también se quiere desarrollar plantas más resistentes a las sequías.
Para llevar a cabo todo esto y poderlo controlar, habrá una especie de campus científico donde se podrá alojar los investigadores, organizar grupos de trabajo o dar charlas.
Se pretende que CITE sea un referente mundial de la investigación. Fráncamente, si logran desarrollar semejante ciudad no dudo que llegará a serlo. Veremos si se queda en una utopía o llega a ser realidad.
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