EN MOMENTOS DE CRISIS… LO MIO PRIMERO

Hay una cosa que es impepinable en todo tipo de trabajos, por muy importante que sea lo que estás haciendo ¿Has hecho ya lo mío?

No hace mucho me he enfrentado a una de esas situaciones que ningún informático quiere enfrentarse, un ataque a sus servidores. Nunca estás preparado para una cosa así y aunque en los primeros instantes intentas luchar contra el bichito, poco a poco te vas dando cuenta que no queda otra opción que volver a levantar el servidor de cero.

Hay que matizar que un servidor no es el ordenador de nuestra casa que lo formatea tu primo en media tarde. En función de que tipo de servidor sea podemos hablar de restaurar servicios, configuraciones, datos, bases de datos, aplicaciones… una puta locura, sobre todo si no hace mucho que has aterrizado y no conoces al 100% que tiene ese servidor. Hablamos de días hasta reestablecer la funcionalidad completa.

El caso es que es una tarea a tiempo completo y con unas cuantas horas extra de regalo pero todo es poco para que tus usuarios amables y comprensivos puedan volver a realizar su trabajo.

Además, algunos de esos usuarios ya se encargan de comprobar que no te estás echando una siesta llamándote de vez en cuando  para decir cosas como: “¿Qué tal vas? ¿Has terminado? ¿Podré tener mi teléfono listo hoy?” o “Puedes ponerme al menos Internet para poder leer el diario ya que no puedo hacer nada”

Pero no hay mal que por bien no venga. Una cosa así te ayuda a conocer un poco más tu informática y a tus usuarios. Como cuando pides que intenten borrar cosas de sus carpetas personales porque la copia de seguridad es demasiado grande y tras mucho esfuerzo se desalojan la friolera de 5 o 10 Gigas. Posteriormente, al restaurar los datos descubres que hay una carpeta de unos 35 Gigas en películas de Disney y fotografías de cenas y fiestas ¡Muy importante salvarlo, claro que sí!

Tras restaurar una copia de unos 2,5 Teras y tener una perdida mínima de datos de puro milagro ya que en informática hay una máxima que es: “A mayor tamaño de archivo, mayor probabilidad de que se corrompa y se pueda perder” a uno le queda claro que efectivamente los usuarios tienen razón con eso de lo mío primero.

A partir de ahora va  lo mío primero. Se acabó hacer la vista gorda con ciertas prácticas informáticas o ciertos vicios que pueden ser peligrosos para la seguridad de la red. Lo mío primero. ¿Por qué haces esto? ¿Qué es un coñazo? ¿Qué vaya rollo? Ya, lo mi primero. Bienvenidos a la era del terror amigos lusers.