Vamos a hablar un poquillo del coche eléctrico con pila de hidrógeno y así todos nos aclaramos un poco.
HABLEMOS DE EFICIENCIA
El coche eléctrico de pila de combustible de hidrógeno consume algo así como el doble de energía que el coche “solo” eléctrico. Es un inconveniente a tener en cuenta.
Para obtener un kilo de hidrógeno se
necesitan unos 55 a 70 kWh de energía, más la necesaria para
comprimirlo. Podemos considerar en un caso favorable que son unos 60 kWh por kilo, lo que se traduce en que la energía
que de verdad está gastando el coche eléctrico de pila de combustible de
hidrógeno son unos 54 kWh/100 k.
Tenemos que considerar de dónde se sacó esa energía,
si era electricidad para la electrólisis del agua, se aplican las
mismas pérdidas por transporte y generación de la electricidad.
Con el coche eléctrico podemos considerar unas pérdidas de 28 kWh/100 km pero con el coche de hidrógeno podemos estar alrededor de
los 91 kWh/100 km en total.
El
rendimiento de la pila de combustible que va a bordo del coche, para
transformar ese hidrógeno en electricidad, es de alrededor del 60 o 70%. Es de pura lógica: cuantos más procesos de transformación de energía
haya, más pérdidas y peor rendimiento habrá al final.
Intentamos hacer una especie de comparación con un coche de gasolina
de tamaño medio con un consumo real
medio de unos 6,5 l/100 km, y considerando el consumo de energía del
pozo a la rueda, viene a suponer unos 68 kWh/100 km. Es decir, el coche
eléctrico realmente nos permite ahorrar energía, pero el coche eléctrico
de pila de combustible de hidrógeno no. Y si no ahorramos realmente
energía mal vamos.
Por lo tanto, un objetivo de los coches eléctricos de pila de combustible de hidrógeno sería mejorar mucho su eficiencia global.
El problema es que la ventaja del coche eléctrico
en cuanto a eficiencia es tan grande, que el coche eléctrico de pila de
combustible de hidrógeno, incluso mejorando, seguiría estando por debajo
PRECIO
Hay que tener en cuenta que todos los componentes de este tipo de coches son bastante caros. Lo más caro es la susodicha pila que se compone de platino o paladio, estamos hablando de unos 50.000 Euros. También estaría el precio del tanque de hidrógeno.
Hoy por hoy el precio de este tipo de coches ronda los 130.000 euros con una autonomía de unos 550 Km, mientras que un coche eléctrico cuesta unos 40.000 euros con autonomías de unos 300 a 400 Km.
SEGURIDAD
Si que es cierto que el hidrógeno es tremendamente volátil e inflamable pero los tanques donde se presuriza son muy seguros, aguantando incluso disparos.
CONCLUSIÓN
Además de todas estas cosas hay que tener en cuenta el precio del hidrógeno y el precio de montar las estaciones donde dispensar el hidrógeno. Todavía sale bastante caro funcionar con un coche de este tipo, pero esperemos que con el tiempo dicho coste se vaya reduciendo. A día de hoy sale mucho mejor un coche eléctrico normal.
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