Parece que llevamos unos cuantos años donde todo el desarrollo va en dirección de las energías renovables porque son más limpias, más seguras, etc... Y de esta manera dar carpetazo a las energías contaminantes e inseguras como la térmica o la nuclear.
Pero por otro lado, aparece la energía de fusión nuclear. Proceso en
el que los átomos de hidrógeno se convierten en átomos de helio. Esta energía es igual o más peligrosa que la de fisión pero la cantidad de energía que puede llegar a producir es como para tenerla en cuenta. No obstante, se trata en cierta manera, de las reacciones producidas en el Sol.
Uno de los problemas con los que se encuentra la producción de energía a partir de la fusión nuclear es que necesita gran cantidad de energía para comenzar la reacción.
Existe una instalación que utiliza 192 haces de láser que pueden
concentrar billones de vatios de potencia en un objetivo minúsculo. El
objetivo de esa concentración de haces es la fusión nuclear.
Hasta ahora los ingenieros del NIF no habían logrado que el hidrógeno se fusionara, y no se sabía la razón, pero los experimentos siguientes han permitido saber cuándo aplicar toda esa energía y cómo, algo que por primera vez produjo helio a partir de hidrógeno.
Esa nueva técnica no llega aún al punto de la ignición,
que es ese momento en el que la fusión de hidrógeno se retroalimenta
para generar más y más energía, pero puede ser el camino hacia una fusión nuclear real.
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