Somos yonkis de los datos. Necesitamos estar conectados pero también queremos ahorrar datos de nuestra tarifa. Buscamos las redes Wi-Fi como si se tratase de una necesidad fisiológica que nos pide nuestro cuerpo. ¡Ayyy! ¡Una rayita... una rayita! Así ya no gasto datos.
El caso es que las tarifas de datos suelen ser mensuales pero mucha gente a los 15 días ya está mendigando Wi-Fi porque se le han terminado los datos o están apunto de ello. ¿Por qué? ¿Sabes en qué los has gastado?
Uno de los principales agujeros negros de datos es la moda de los vídeos de YouTube o Netflix. Además como nos gusta verlo en HD pues... ¡Adiós datos! Pero... hay que tener claro que podemos configurar YouTube o Netflix para poder ver los vídeos en una calidad más baja y así ahorrar datos. De esta manera el consumo sería de 0,3 GB por hora.
Si hablamos de audio, hablamos de Spotify donde el consumo varía en torno a los 70MB por hora. Igual que en el caso del vídeo, también podemos configurar la calidad de la reproducción.
Por supuesto, una de las cosas más importante a la hora de consumir datos son las descargas de esas tonterías del Whatsapp pero podemos tenerlo configurado para que solo se descargue cuando esté conectado con Wi-Fi y a sí evitar sorpresas terroríficas.
¿Cómo podemos saber los datos que consumen nuestras aplicaciones?
Supongo que muchos ya lo sabréis pero nuestros Smartphones nos dan la posibilidad de ver que aplicaciones consumen más o menos datos. Gracias a los ajustes que nos ofrecen podemos limitar o controlar el uso de los mismos.
Si no nos gusta esa opción y somos de usar Apps, existen muchas que nos pueden ayudar a controlar los datos como la propia de Tuenti, Datally o My Data Manager con las que tendremos un mayor control sobre nuestros consumos.
Estas aplicaciones nos permiten poner alertas para no pasarnos de nuestro consumo y evitar casos como que dejemos el teléfono en modo Hotspot sin darnos cuenta y se vayan los datos por el desagüe. También nos permiten realizar cálculos de consumos de datos en función de tiempos de utilización de determinadas aplicaciones.
Con esta información espero que podáis controlar un poco más los datos y que evitéis esas situaciones de búsqueda de Wi-Fi desesperada o desconexiones temporales por falta de datos. Por cierto, hay vida más allá de los datos.
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